el hotel tenía vistas al jardín y la habitación era fantástica. un personal servicial y acogedor, nos sugirieron lugares para visitar. el hotel servía café, pasteles, fruta, tortilla francesa y queso para desayunar. la ubicación era perfecta y buena, estaba a solo 5 minutos andando del castillo aragonés.

Las habitaciones son maravillosas y tienen todo lo necesario para cocinar, un lugar ideal para escapar del bullicio y el ruido.

He dormido en una habitación doble durante 2 noches, contaba con tanto facilidades para concinar como cocina. El desayuno tenía un montón de opciones, incluyendo huevos, queso y panes:)))

Cocina en la habitación para preparar comida. El personal superamable y me ayudó con el parking privado. La ubicación es perfecta, tienes el Castillo Aragonés a un paso de aquí. ¡Genial! 🏰